La corporación de Santiago votará, en el pleno de este jueves, la aprobación de una moratoria en la concesión de nuevas autorizaciones para pisos de uso turístico, una medida cautelar mientras no se tramita una modificación del PXOM que regulará esta materia. “Nuestro objetivo no es eliminar los pisos turísticos, que es una oferta que llegó para quedarse y que responde a una demanda del mercado, pero lo que sí queremos es regular y limitar, porque lo que no podemos permitir es que un fenómeno coyuntural arrase nuestro modelo de ciudad”, señaló al respecto el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo. Para el regidor, “el problema no son los 641 establecimientos reconocidos a día de hoy por la Xunta, sino un número muy superior que funciona de forma irregular”, además del incremento “exponencial” de las demandas de nuevas autorizaciones. Bugallo explicó que esta moratoria responde al convencimiento de que, de no adoptarla en estos momentos, “dentro de un año sería tardía e inútil la modificación del Plan Xeral”.
En esa modificación, apuntó el alcalde, “será muy importante armonizar las normativas municipal y autonómica y, en esta dirección, para evitar contradicciones evidentes, trabajaremos con la Consellería de Cultura e Turismo”. Sánchez Bugallo afirmó que será necesaria una reflexión sobre la planta hotelera de Santiago, que “ya tiene una oferta muy elevada”, dijo. Así, el alcalde cifró en unas 13.000 las plazas hoteleras de Compostela, “una oferta enorme para una ciudad de 90.000 habitantes”, incidió. En ese sentido, el regidor apuesta por preservar con carácter general que en las áreas residenciales se mantenga ese uso, fijando un número máximo de autorizaciones tanto a nivel general como por zonas.