El Clúster Alimentario de Galicia (Clusaga) y el Clúster del Packaging de Cataluña han coordinado el proyecto ‘SmartLabels’, que ha explorado la viabilidad de utilizar nuevas tecnologías de impresión en etiquetas autoadhesivas para botellas de vino, que hacen posible hacer un seguimiento real del producto durante todo el proceso de producción y distribución, además de evitar falsificaciones, o facilitar la interacción del consumidor con el packaging y la marca. Ambas entidades han vinculado las necesidades de digitalización de las Bodegas Paco & Lola y Matarromera con el conocimiento del centro tecnológico Eurecat y los recursos del fabricante de etiquetas y sleeves IPE Industria Gráfica, con el objetivo de obtener etiquetas inteligentes destinadas al sector vitivinícola, pero fácilmente replicables a otros sectores.
Entre los principales beneficios para el sector vinícola, además del control de todo el proceso de distribución del producto, se destaca que a través de la tecnología sin contacto (contactless) se puede crear un vínculo con el consumidor a la vez que se comparte información de interés sobre la marca y el producto.
Destacan desde el Clusaga que la colaboración entre diferentes comunidades autónomas y distintas industrias ha permitido que la iniciativa ‘SmartLabels’ alcance un grado de potencialidad muy alto, al introducir un concepto escalable en otros ámbitos y generar un conocimiento de gran valor añadido en línea con la Estrategia Nacional de Industria Conectada 4.0.