Tras consolidarse en la escena gastronómica coruñesa con La Cantina Sixtina, Ramón Vidal llega a Santiago de Compostela -acompañado por su hija, Alejandra Vidal- con un proyecto que promete conquistar tanto a locales como a turistas: Vitela Cachopería. Ubicado en la emblemática Rúa do Preguntoiro, este establecimiento combina la gastronomía gallega y asturiana, como explica Alejandra, quien lidera este nuevo desafío. El plato estrella es el cachopo, disponible en versiones que van desde el clásico hasta propuestas más creativas como el cachopo de beicon ahumado y queso cheddar. Todos ellos comparten una base común de ingredientes de máxima calidad: filete de ternera gallega y queso de Arzúa, con opciones sin gluten y veganas para quienes lo prefieran. Además, el cachopo se ofrece en tres tamaños distintos: el tradicional, el cachopín (pensado para una persona) y el panchopo, “que va entre pan de cristal con lechuga, tomate y cebolla”, señala Alejandra, quien agrega que “en Vitela contamos con un obrador donde elaboramos nuestros cachopos frescos cada día”. Pero la carta de este local no se limita a los cachopos. Entre sus especialidades también destacan los calamares de la ría y el pastel de cabracho, platos que pueden acompañarse con sidra escanciada o una selección de vinos gallegos y nacionales. El broche final lo ponen sus postres, como el arroz con leche, la tarta de queso al horno con arándanos o dulce de leche, el tiramisú y el coulant de praliné con helado de mango.