La picaresca en el sector de la alimentación vuelve a ponerse de manifiesto, si bien en esta ocasión los tribunales han impedido que el pícaro se saliese con la suya. Hablamos en este caso de la controversia surgida tras el registro, por parte de un particular, de la marca ‘Canar y Wine’, extremadamente parecida a Canary Wine, registrada por la DOP de Vinos Islas Canarias. Por aquel entonces -el año 2018- la Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias (AVIBO), como Órgano de Gestión de la DOP, reclamó por vía judicial que ese registro en la Oficina Española de Patentes y Marcas no se llevara a efecto, dada la similitud de ambas enseñas. Pues bien, tras una serie de recursos por parte de la demandada, parece que el caso llega a su fin tras la sentencia firme de la Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria que ha vuelto a desestimar íntegramente las acciones interpuestas por la propietaria de la marca comercial ’Canar y Wine’, como ya había hecho en su día el Juzgado de lo Mercantil Nº1 de Las Palmas de Gran Canaria, imponiendo incluso las costas procesales.
Así pues, la Justicia estima íntegramente lo solicitado en vía judicial por la Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias (AVIBO) y finaliza la controversia judicial en un doble sentido: no puede utilizarse la marca Canary Wine (y las que sean similares) por ningún tercero, únicamente por AVIBO al estar protegida como Denominación de Origen; y, en segundo lugar, establece la nulidad del registro de la marca española ‘Canar y Wine’ por infracción de las prohibiciones absolutas previstas en su normativa, ordenando a la Oficina Española de Patentes y Marcas para que se proceda a la cancelación del registro de la misma.