En Monterrei, en el viñedo de Vilardevós -propiedad de Martín Códax Viticultores-, están preparados para enfrentarse al riesgo de heladas de la mano de la innovación y la tradición. Y es que esta medianoche el entorno se iluminó con más de 4.000 pequeñas hogueras cuya misión era proteger los brotes de la helada que amenaza con deteriorarlos.
Debido a las heladas del 2017, que afectaron a los viñedos en el norte de España, la bodega cambadesa comenzó a trabajar con este reconocido mérito utilizado en Francia. Desde entonces, Martín Códax ha implementado un enfoque combinado para proteger sus viñedos. El método de las “candelas”, que es uno de los pilares de protección, consiste en desplegar botes de parafina por el viñedo que se encienden, elevando la temperatura hasta dos grados. Sin embargo, la bodega decidió en 2019 ir un paso más allá e implementar un sistema de ventiladores para prevenir repentinas heladas. En este sentido, estas torres de aire protegen entre cinco y ocho hectáreas cada una, funcionando de forma automática para evitar la acumulación de frío.
Así, la finca cuenta con cuatro torres de ventiladores y un total de 4.500 candelas. Cabe destacar que la combinación de métodos tradicionales y tecnológicos no sólo preserva los cultivos de Martín Códax, sino que también actúa contra el cambio climático.
