Se acerca la época en la que nos podemos reír de todo. El carnaval en Galicia, el Entroido, es un gran acontecimiento en el que la tradición, el desenfreno, el espectáculo y la gastronomía se dan la mano para convertir a nuestra Comunidad en una auténtica fiesta. Un sinfín de personajes únicos toman las calles de las ciudades y de los pueblos para llenarlas de alegría, de color y de vida, atrayendo a miles de visitantes.
La provincia de Ourense puede presumir de tener los carnavales más reconocidos, y entre ellos destaca el de Xinzo de Limia como el más largo de toda España -y probablemente del mundo- puesto que se festeja durante cinco fines de semana, arrancando con el Domingo Fareleiro y terminando el Domingo de Piñata. Hay fiesta desde la mañana hasta la noche, pero es importante saber que siempre hay que ir disfrazado porque si no las Pantallas nos pueden dar nuestro merecido.
Estas figuras van con la cara cubierta con una magnífica máscara que nunca se quitan, hecha de una sola pieza, en pasta de papel, y pintada con una cara que recuerda a un demonio guasón. Van ataviadas con camisa y calzón blancos, polainas y zapatos negros, capa roja o negra, fajín rojo con campanillas y pañoleta y con sus ruidosos e inconfundibles “globos”, elaborados a partir de vejigas de animales.
Semanas de diversión y festines gastronómicos en el Entroido de Verín.- Tanto si tenemos un alma carnavalera como si no, seguramente hemos oído en alguna ocasión lo especial que es el carnaval en Verín. Esta villa se llena durante días de bandas de gaitas, carrozas, charangas y comparsas que ponen a bailar a todos los presentes. Pero si hay una figura en este Entroido que brilla sobre las demás es el Cigarrón. Este personaje goza de inmunidad y nunca debe ser tocado (pobre de aquel que lo haga). Luce un elaborado atuendo que puede llegar a pesar 25 kilos y lleva una fusta que utiliza como mejor le parece. Además de tener mucha tradición, el Carnaval de Verín es sinónimo de fiesta. Los días más destacados son el Xoves de Compadres, el Domingo Corredoiro, el Xoves de Comadres (el día de las damas), el Venres de Compadreo, el Domingo de Entroido, el Luns Fareleiro y el Martes de Entroido con el gran desfile de carrozas y Cigarróns.
El Peliqueiro, protagonista del carnaval de Laza.- Junto con Verín y Xinzo, Laza forma parte del trío de ases de los carnavales más significativos de la provincia de Ourense. “En Laza, el Entroido es una de las fiestas más importantes que tenemos. En sí no es una fiesta, es una tradición que desde pequeños comenzamos a cultivar. Es un Entroido con carácter ancestral y tradicional”, apunta Xacobo García, presidente de la Asociación Cultural Enlazados.
La celebración arranca el 1 de enero cuando los jóvenes (aquellos que se vestirán días después de Peliqueiros) salen a la calle para hacer sonar sus cinturones de “chocos”. Asimismo, se celebran los viernes los “foliones”, procesiones nocturnas en las que la muchedumbre porta antorchas de paja. Posteriormente, el viernes que precede al domingo de carnaval, el llamado “gran folión”, tiene lugar una cena en la que se exaltan productos típicos de la zona como la bica blanca. Llegado el sábado, el pueblo se entrega a la “Fariñada”, una batalla de harina.
Después de unos días llenos de diversión y emoción, el domingo es el día en el que se estrenan los Peliqueiros, el momento más esperado. Su traje artesanal se compone de una chaquetilla corta con charreteras de corte militar, pantalón de lino, camisa, corbata, medias y unas llamativas ligas. Además, los Peliqueiros llevan a la cintura dos fajas y un cinturón con seis “chocos”. Otro de sus símbolos es su “zamarra”, un objeto con el que se saluda y se castiga a los viandantes.
Travesuras en Maceda de la mano del Felón-. Como se ha ido mostrando anteriormente, se puede decir con rotundidad que Ourense es la provincia carnavalera por excelencia, y prueba de ello es el entroido de Maceda. Es allí por donde pasea el personaje más ilustre del pueblo, el Felón, una figura única en su especie. El Felón se distingue de sus primos hermanos (los Peliqueiros y Cigarróns) por sus medias negras, su rabo de zorro en lo más alto de la máscara, sus collares, su bastón, sus cinco cencerros, sus botas y su máscara, decorada con fauna de la sierra de San Mamede. Todo ello imprime carácter a este ser que solamente puede ser encarnado por hombres solteros.
El Boteiro y el Fulión toman las calles de Vilariño de Conso-. En este Entroido, el Boteiro es el rey y el encargado de dirigir el Fulión, un grupo de personas que tocan bombos y guadañas. Centrándonos en los Boteiros, éstos llevan una máscara elaborada a base de cartón forrada de pelo y piel de cabra y una camisa y un pantalón bordado. Al igual que otras figuras carnavaleras, van también con un cinturón del que cuelgan las ruidosas chocas y portan en su mano una vara, la “monca”. Como citas ineludibles estos días en Manzaneda, están los Xoves de Compadres y de Comadres y la Festa do Cabrito, que se desarrolla en el conocido como Domingo Gordo.
Gastronomía y música se dan la mano en Viana do Bolo.- En esta localidad no se entiende el carnaval sin la gastronomía, siendo su plato estrella la androlla, un embutido de cerdo típico de la comarca que llega al Entroido en el punto perfecto. Pero la androlla comparte protagonismo con el Boteiro y los Folións. El Boteiro de Viana do Bolo lleva la cara tapada por una imponente careta y un vistoso traje de cintas de seda. Su misión es la de abrir paso al folión, una comparsa que con su música espanta los malos espíritus. Además, este divertido Entroido es conocido por vivirse en la calle y por ser, probablemente, el más antiguo de nuestra Comunidad.
Un carnaval en alta montaña-. El carnaval de Manzaneda es uno de los más icónicos de Galicia ya que conserva la autenticidad de sus tradiciones. De esta manera, el Folión Tradicional de Manzaneda es una festividad llena de rituales ancestrales, banquetes y teatro. El personaje central de este acontecimiento carnavalero es A Mázcara que, al contrario de lo que pueda parecer, lleva el rostro descubierto. En su cabeza -también llamada “pucho”- luce un tocado, y su vestimenta se compone de camisa y polainas blancas, mantilla floreada, botas altas, bastón y cintas de colores. A la cintura, varios cencerros marcan el ritmo de A Mázcara, que sobresale por ser un elegante bailarín. Además, esta figura es el acompañante de un Folión, una comparsa que va de unas aldeas a otras.
Generales a caballo en el Entroido da Ulla-. Además de los afamados entroidos ourensanos, hay otros lugares en Galicia en los que se vive un carnaval único. En este sentido, del 20 de enero al 18 de febrero, la comarca natural de A Ulla (Boqueixón, A Estrada, Santiago, Silleda, Teo, Touro, Vedra y Vila de Cruces) volverá a vivir su original entroido, del que se tiene constancia desde mediados del siglo XIX: el Carnaval Rural Tradicional de los Xenerais da Ulla. Así, los personajes más importantes de este evento son los Generales y Correos a caballo, que recorren las parroquias acompañados de un “ejército” de abanderados, coros, comparsas y parrandas. Terminan escenificando un “alto”, o enfrentamiento dialéctico por parejas en el que hacen sátira de los sucesos más relevantes del año.
De todos los personajes típicos de este Entroido, es conveniente centrarse en los Generales, que se caracterizan por lucir un original traje que evoca uniformes militares de época. En la cabeza llevan un vistoso tricornio acabado con plumas, normalmente de pavo real.
Danza y color se dan cita en el Carnaval de Cobres.- Otro de los entroidos que destacan en nuestra tierra es el de Cobres (Vilaboa de Morrazo, Pontevedra). Esta festividad, que se remonta a principios del siglo XVII, es una de las más atractivas que se celebran en tierras gallegas. Un hecho que se debe a sus coloridos trajes; atuendos que lucen con elegancia las Madamas y los Galanes, los principales personajes de este carnaval. Las cintas, los abalorios, los relojes y los sombreros son algunos de los accesorios que adornan sus ropajes.
Además de la belleza de los atuendos, el baile sobresale como uno de los elementos principales del Carnaval de Cobres. Durante los cuatro días de diversión (sábado, domingo, lunes y martes de Entroido), la comparsa transita todas las pistas de las dos parroquias organizadoras (Santa Cristina y San Adrián), parándose cada vez que llega a la vivienda de algún vecino. El Entroido de Cobres se desarrolla entre bailes y verbenas nocturnas hasta el Martes de Carnaval, el día grande de la fiesta en el que se celebra la “Corrida do Galo”, unos juegos populares en los que los “vellos” buscan al mejor gallo (de forma figurada) y bailan a su alrededor. Así, mientras todos están de fiesta alguien roba el gallo y los “vellos” son los encargados de recuperarlo.
Otras citas ineludibles.- Además de los carnavales de Interés Turístico que acabamos de relatar, nuestra Comunidad está plagada de celebraciones carnavaleras que son sinónimo de tradición, diversión y singularidad, y en todos ellos existen personajes icónicos que animan a propios y ajenos a sumarse a la fiesta. Los Follateiros de Lobios son unos de los más sorprendentes. Nativos de esta zona de Ourense, estas figuras se mantienen impertérritas al paso del tiempo. Y es que sus trajes se hacen a base de “follatos”, esto es, hojas de maíz, siguiendo una tradición de la Sierra del Xurés. Los granos de colores rojos, amarillos o negros decoran su máscara de cartón y los cinturones y los corpiños están hechos con el carozo de la mazorca. Como curiosidad, los hombres portan un palo para levantar la falda a las mujeres, mientras que ellas se defienden con “toxos” para evitar que ellos se las levanten.
Si nos vamos a la Ribeira Sacra, concretamente a Chantada, descubriremos un carnaval singular, el Ribeirao. En la actualidad, este Entroido es uno de los más importantes en Galicia puesto que conserva intacta su riqueza etnográfica; una cita que calienta motores con tres rituales previos a su celebración, siendo el más destacado la batalla de harina. No se puede concebir este carnaval sin sus icónicos personajes, los responsables de llenar de júbilo las calles. Los Volantes, que representan a los antiguos señores feudales, usan llamativos ropajes, una máscara hecha con hojas de periódicos y van ataviados con un cinturón de cuero con veinticuatro campanillas.
Otra de las figuras representativas del Entroido Ribeirao son los Peliqueiros o Maragatos, los cuales no dejan indiferente a nadie. A diferencia de los Volantes, estos seres destacan por sus ropajes viejos y pobres. Generalmente ocultan su cara con una careta de piel y llevan a la espalda una campana que emplean los bueyes. Su cometido no es otro que abrir paso a los Volantes con una correa de cuero, un espectáculo digno de ver en el que la música también está presente.
Cerramos este recorrido por los Entroidos de Galicia en Pontevedra. Allí encontramos un evento que ensalza la figura de un loro. Ello se debe a que en 1980 abrió las puertas la botica de Don Perfecto Feijóo en la Plaza de la Peregrina. Un lugar que sirvió como punto de encuentro de la sociedad de antaño pero que pasó a los anales de la historia por un curioso ser que habitaba en él: el loro Ravachol. Su muerte supuso una triste noticia para la ciudad, que se dividió entre la alegría y el luto ya que falleció a las puertas del carnaval. Esta curiosa coincidencia se acabó convirtiendo en todo un acontecimiento. Así, cada Lunes de Entroido sale a las calles pontevedresas una figura que lo representa, acompañada por un séquito de personas disfrazadas que lamentan su partida y contemplan cómo se quema.
La lista podría ser mucho más amplia porque Galicia entera es una fiesta durante el Carnaval, pero sirva esta selección como ejemplo de las diferentes expresiones etnográficas y culturales con que el Entroido se manifiesta en nuestra Comunidad, de mano de sus icónicos personajes y de la ciudadanía, que se implica para que estas tradiciones pervivan generación tras generación.