Los sectores de la intermediación y comercialización de viajes y productos turísticos en Galicia hacen público un comunicado conjunto en el que piden “el apoyo y la comprensión de la sociedad, que tiene que conocer la situación que estamos atravesando y valorar nuestro esfuerzo y responsabilidad en la lucha contra la pandemia”. Al tiempo, los profesionales reclaman a las Administraciones públicas “ayudas que nos permitan afrontar nuestros gastos operativos, y que para evaluarlas tengan en cuenta aspectos como la dimensión de las empresas, el número de empleados y las fechas desde las que hemos tenido que afrontar las consecuencias de las medidas adoptadas”.
Y es que las empresas que se dedican a la intermediación y comercialización de viajes y productos turísticos están viviendo un auténtico infierno desde la declaración de la pandemia, pues prácticamente no han podido trabajar, lo que genera un “riesgo extremo y real” de que la actual situación provoque “la desaparición de empresas, la pérdida de puestos de trabajo y un retroceso de décadas en el desarrollo de una industria esencial, social y económicamente estratégica y competitiva para nuestra Comunidad”, dicen.
Insisten en que los mayoristas y agencias de viajes de Galicia “desarrollamos una actividad económica rentable y hemos consolidado un sector maduro y relevante desde el punto de vista social y económico” que es “esencial” para el mantenimiento de Galicia como un destino turístico “atractivo y rentable”. Apelan al papel que juegan en la consolidación y difusión de la ‘marca Galicia’ y recuerdan que en estos momentos “afrontamos una pérdida de actividad sin precedentes y de consecuencias imprevisibles provocada por un factor ajeno a nuestro desarrollo industrial y profesional”.
Es por ello que reclaman ayudas directas que contribuyan a paliar la actual situación. “La facturación de nuestras empresas será en 2020 de en torno a un 10 por ciento de lo que facturamos en 2019 y en ningún mes de este año las empresas alcanzaron a facturar un 50 por ciento de lo que habían facturado en 2019”, una situación crítica que incluso comenzó antes de la declaración del estado de alarma “ya que teníamos operaciones que habían sido ya contratadas y que tuvieron que ser anuladas”. En ese sentido, los profesionales se lamentan de que “los proveedores no devuelven el importe de los viajes cancelados y, sin embargo, nosotros sí que se los tenemos que devolver a nuestros clientes”.
Es por ello que inciden en que “la actual situación está amenazando a empresas consolidadas y rentables en una situación de normalidad, que volverá tarde o temprano. Si las empresas no resisten ahora, habremos destruido una industria esencial que nuestra sociedad y nuestra economía necesitará cuando llegue ese momento”.
Foto: Tee Travel
