Si nos ponemos a pensar en Murcia desde un punto de vista gastronómico, quizá las verduras sean lo primero que se nos viene a la cabeza. Pero esta región tiene muchos más sabores que ofrecer, acompañados de una naturaleza, un patrimonio, una cultura y un clima privilegiados. Así se demostró a través del showcooking que, dentro del road show ‘Taste and Travel’, se desarrolló en A Tafona (Santiago de Compostela) de la mano del chef David López de Local de Ensayo (1 Sol Repsol). En la demostración, el cocinero murciano -a cuatro manos con la compostelana Lucía Freitas- reinterpretó platos y elaboraciones tradicionales de la gastronomía de aquella región, pero con un necesario toque de vanguardia que aporta la alta cocina que practica.
Así, no faltaron la Marinera (típico aperitivo murciano), el bonito de la almadraba de La Azohía (la última almadraba en uso del Mediterráneo), la gamba roja de Águilas, el Zarangollo, el arroz de Calasparra al caldero, el Paparajote o el Café Asiático; sabores perfectamente reconocibles de la gastronomía murciana que se expresaron en plenitud acompañados de vinos de las tres denominaciones de origen con que cuenta la Región de Murcia. Así, degustamos un Barahonda Organic Blanco (DOP Yecla) con los entrantes y los aperitivos; un coupage de Verdejo y Sauvignon Blanc que sorprendió por su frescura. A continuación, nos trasladamos a la DOP Bullas para tomar un gustoso Salto del Usero Barrica (100% Macabeo, cosecha 2016) y terminamos con un fino y elegante DOP Jumilla de una de las bodegas que está marcando el paso en la zona: Remordimiento de Bodegas Cerrón.
En el transcurso del evento, el director general de Turismo de la Región de Murcia, Juan Francisco Martínez, destacó el papel fundamental que hoy en día tiene la gastronomía como motivación para realizar un viaje. “Ocho de cada diez turistas que visitan Murcia señalan que una de sus principales razones para elegirnos es la gastronomía; que ya es el segundo producto turístico más valorado de la Región”, apuntó. No en vano, Murcia propone innumerables experiencias gastronómicas en sus diferentes comarcas -bien de interior, bien de costa- y durante todo el año. Prueba de ello es el despegue que está experimentando el enoturismo, de la mano de las tres rutas del vino existentes (Bullas, Yecla y Jumilla). Solo falta –puntualizamos– mejorar las conexiones con Galicia, un aspecto en el que está trabajando el Gobierno de la Región, fundamentalmente en el plano aéreo. Otra opción interesante puede ser el AVE que une Ourense con Alicante en algo menos de cinco horas, y que nos sitúa a tiro de piedra de una comunidad que está deseando recibir a los turistas gallegos.