El pleno del CRDO Ribeiro, en sesión plenaria celebrada este jueves, acordó el establecimiento del 31 de agosto como fecha de cierre definitivo de su Registro Vitícola hasta que finalice la vendimia de este año, acordando los vocales una medida excepcional sin precedentes en el Ribeiro que es exigir a todos los viticultores la actualización de su registro de viñas como requisito imprescindible para poder entregar uvas en esta campaña. Con esta decisión, el Consejo Regulador “toma medidas contundentes para prevenir cualquier tipo de fraude en las declaraciones de entrada de uva y fortalece los controles en la totalidad de los eslabones de la cadena de producción, con el fin de asegurar la certificación de su producto”, inciden desde el órgano.
Paralelamente, desde el Consejo Regulador se está procediendo a la entrega de una nueva tarjeta de viticultor a todas aquellas personas que actualmente tengan viñas en producción dentro de la Denominación de Origen y que hayan actualizado su situación en el registro. Para ello, el CRDO Ribeiro está emplazando a todos los viticultores correctamente registrados a que pasen por la sede con el fin de recoger el nuevo modelo de tarjeta. “Es muy importante clarificar que ningún viticultor podrá entregar uva en ninguna bodega de la Denominación de Origen si no dispone de la nueva tarjeta y consecuentemente, de sus datos actualizados en los registros del Consejo Regulador”, reiteran desde el Consejo.
Asimismo, el pleno del CRDO Ribeiro aprobó un incremento del 25% en el rendimiento de kilos de uva por hectárea para esta vendimia 2019, como medida de adaptación a la realidad de una cosecha que se presenta como “excepcional”. El Consejo indica que esta decisión está basada en los datos obtenidos en las inspecciones de estimación de rendimientos que técnicos del órgano de control están realizando desde los primeros días del mes de agosto y que apuntan a una cosecha excepcional en la mayoría de las variedades.