El Consejo de Ministros ha aprobado un Real Decreto que modifica la normativa vigente sobre calidad de la miel en lo relativo a su etiquetado para garantizar una información más detallada sobre el origen del producto. Para ello se establece que cuando una miel se haya elaborado a partir de mieles de distinta procedencia, se deberán indicar en el etiquetado el listado de todos los países de origen donde se haya recolectado. Cuando la miel proceda de un único país, también será obligatorio indicarlo en la etiqueta, por lo que la miel 100% española se podrá identificar claramente.
“Con este Real Decreto, que favorece la transparencia en la información -inciden desde el Gobierno de España- el consumidor tendrá un conocimiento más completo sobre el origen de la miel, lo que le permitirá ejercer una opción de compra con más fundamento. Además, los apicultores españoles, que producen una miel de excelente calidad, podrán competir en el mercado en mejores condiciones con la miel que proviene del exterior”.