La hostelería española está liderando la lucha contra el cambio climático dentro de su sector y lo hace de la mano de una iniciativa pionera en el mundo que permite a los bares y restaurantes comprometidos con el medio ambiente reducir el impacto de su actividad reduciendo emisiones. Hostelería #PorElClima, nacida en 2017 de la mano de Ecodes y Coca-Cola, y que cuenta con la colaboración estratégica de Hostelería de España, va más allá de la sensibilización pues pone a disposición de los hosteleros una plataforma virtual que les ayuda ofreciéndoles información para que puedan alcanzar el objetivo de ser espacios más sostenibles y disminuir su huella de carbono.
Desde esa posición de vanguardia, Hostelería #PorElClima realizará un llamamiento en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático -conocida como COP27, que se celebrará entre el 6 y el 18 de noviembre en la ciudad egipcia de Sharm El Sheikh, para invitar a los hosteleros de todo el mundo a trabajar por la ambición climática en favor de un modelo capaz de dar una respuesta real y trascendente hacia una economía descarbonizada. “No hay tiempo para más dilaciones. El desafío climático es tan enorme que tenemos que actuar todas las personas, no solo los Gobiernos. Cada empresa, cada ciudad, cada región, cada escuela, cada entidad social y cada persona tenemos una cuota de responsabilidad. Hacemos un llamamiento a esta responsabilidad y movilización compartida. En la hostelería, cada uno tiene un papel que desempeñar en la aceleración de la acción climática y, por lo tanto, todos somos necesarios”, explica José Ángel Rupérez, presidente de ECODES (secretaría técnica de la Comunidad #PorElClima).
Carmen Gómez-Acebo, directora de Sostenibilidad en Iberia de Coca-Cola Europacific Partners, destaca “el firme compromiso demostrado por el sector de la hostelería en la lucha contra el cambio climático desde sus propios negocios, dentro del objetivo común de ser una sociedad neutra en carbono, que no será posible sin la colaboración de todos”. Gracias a su contacto con la sociedad, “los hosteleros pueden convertirse en ejemplo para otros sectores económicos con los que tiene relaciones directas por medio de proveedores y clientes, que están cada vez más interesados en adquirir productos sostenibles. Incluso esta influencia puede extenderse a otros países. Nosotros queremos estar con ellos para apoyarles en este objetivo”.
Aunque su alcance es internacional, el origen de esta propuesta surge de la acción directa del sector español, que ya muestra su compromiso a través de Hostelería #PorElClima, una iniciativa pionera en el mundo que permite a los bares y restaurantes comprometidos con el medio ambiente reducir el impacto de su actividad reduciendo emisiones. El resultado de este proyecto, al que en los últimos años se han adherido un total de 3.500 establecimientos, es el desarrollo de más de 54.000 acciones por el clima. Un aspecto relevante de la iniciativa es que ha conseguido fijar una foto general de la huella de carbono de los bares y restaurantes españoles -un indicador que cuantifica la cantidad de gases de efecto invernadero liberados a la atmósfera durante su actividad-, lo que contribuye de forma clave a definir el plan de acción en la lucha contra el cambio climático. A partir de ella, se ha elaborado una guía del negocio hostelero descarbonizado en la que se explica paso a paso cómo un negocio hostelero puede reducir su huella de carbono para convertirlo en un local “Cero Emisiones”.
Gracias a un programa piloto para su medición, desarrollado por Hostelería #PorElClima entre 2020 y 2022, se ha llegado a la conclusión de que la media de toneladas emitidas por un establecimiento hostelero en España es de 92 kilos de CO2 por m2 y año. Esta cifra demuestra que las emisiones del sector son muy limitadas en comparación con otros, pero también refleja que hay que seguir haciendo esfuerzos para reducir las emisiones lo máximo posible y, de esta manera, ser un agente de cambio positivo para la descarbonización. Según el mismo estudio, las fuentes de emisión más frecuentes en los establecimientos hosteleros y que mayor número de toneladas emiten son el consumo eléctrico, seguido por el de combustibles fósiles -utilizados principalmente en la cocina y las calefacciones tanto de la terraza como de sala- y, por último, los gases refrigerantes.