Bodegas Emilio Moro, bodega familiar con más de 100 años de historia radicada en el corazón de la Ribera del Duero quiere, a través de los vinos que elabora, rendir homenaje a sus orígenes compartiendo su historia. Y no sólo en cuanto a sus elaboraciones sino también a la presentación de las mismas. Eso ha querido plasmar en la nueva imagen de sus tres Godellos del Bierzo: Polvorete, El Zarzal y La Revelía. Estos vinos “representan la gente, la orografía y la identidad del valle berciano. La unión perfecta entre la tradición heredada de sus antepasados y la particularidad del terroir de la zona, trabajado con el máximo respeto a una variedad única, la godello”, indican desde la bodega.
A través de un viaje a la esencia berciana, el equipo de Bodegas Emilio Moro ha descubierto algunas de las huellas que los pobladores de la zona dejaron hace miles de años en forma de pinturas rupestres, y que hoy recogen como demostración de su paso por esta esta tierra “tan especial”. Este testimonio, encontrado en las paredes de la Cueva del Moro, situada a pocos kilómetros de la bodega que el grupo tiene en el Bierzo, ha inspirado la nueva imagen que, efectivamente, une pasado, presente y futuro a través de un diseño que gana en limpieza y elegancia.
Junto a este cambio de imagen, Bodegas Emilio Moro presenta las nuevas añadas de sus Godellos que, manteniendo su esencia, han logrado convertirse en tres vinos de referencia en nuestro país. Polvorete 2022 es la versión “más joven, rebelde y divertida”; El Zarzal 2022 atrapa por su frescura y acidez equilibrada respetuosa con la variedad y La Revelía 2021 –la última añada que ha salido al mercado– destaca por su complejidad, gracias a su crianza sobre lías que lo hacen carnoso y untuoso.
