La Deputación de Ourense desarrolla desde 2013 el Programa de Termalismo Social, al que este año se ha unido una nueva modalidad, denominada “Termalismo inclusivo”, orientada principalmente (aunque no de manera exclusiva) a personas con diversidad funcional y a aquellas pertenecientes al sector de la “economía de los cuidados”, apuntan fuentes provinciales. La puesta en marcha en 2024 del “Termalismo inclusivo” permite diseñar programas personalizados para colectivos sociales en función de las circunstancias y problemáticas específicas. Además, esta nueva modalidad va a estar abierta y disponible para todas las entidades sociales sin ánimo de lucro.
Uno de los primeros colectivos que mostraron interés por participar en el nuevo programa fue la Asociación Píntega para la promoción de la salud mental. A partir de ese interés, el área de Benestar diseñó una programación específica, consistente en sesiones quincenales –durante un total de 3 meses– en el Balneario de Cortegada, que incluyeron una terapia basada en el ejercicio físico en piscinas termales en un entorno no institucionalizado y en medio de la naturaleza. El coste por jornada fue de 2,5 euros, mientras que la Deputación aportó el resto. En total, el programa costó a cada usuario 14 euros.
En una primera valoración, la Asociación Píntega trasladó su “alta satisfacción” con la iniciativa, señalando que lo que más se valora es, precisamente, que se tenga en cuenta al colectivo de personas con problemas de salud mental. También destacaron el ambiente que rodea al Balneario de Cortegada, que invita a la relajación.
