“El Colón de este nuevo mundo de salud fue un borrico”. Con estas palabras, Emilia Pardo Bazán hizo grande en su día la leyenda que atribuye a un burro el descubrimiento de las aguas termales que impulsaron el tirón turístico de A Toxa. Hoy, un siglo después, esta leyenda ha quedado inmortalizada con la inauguración de la escultura de bronce elaborada por el artista Lucas Míguez que representa al equino, fruto de la colaboración entre la Deputación de Pontevedra y el Concello do Grove.
La escultura, instalada cerca de la capilla de las conchas y que a buen seguro se convertirá en nuevo punto de visita de los turistas, representa al burro a tamaño natural revolviéndose en el barro, al igual que la leyenda dice que fue su forma de curarse tras ser desahuciado por su dueño, hecho que llamó la atención de los vecinos sobre las propiedades curativas de las aguas. Junto a la figura se han instalado dos placas: una que rememora la cita de Emilia Pardo Bazán publicada en 1899 en la revista ‘La Ilustración Artística’, y otra con la cita de Wenceslao Fernández Flórez, datada en A Toxa en 1920, en la que anima a plasmar la idea de la escritora para dedicar una estatua al animal.
Para el alcalde, José Cacabelos, la instalación de la escultura tiene una gran importancia para el municipio porque “simboliza el factor desencadenante de que O Grove hoy sea un espacio y destino turístico importante, con A Toxa a la cabeza”.