Enigma es un vino blanco que surgió de forma accidental con las uvas de todos los vecinos del valle de Bibei, después de que una granizada acabara con la mayor parte de la producción. Elaborado con un sinfín de variedades como Godello, Treixadura, Blanco Lexítimo, Colgadeira y Agudelo, fermentó en una barrica nueva de roble húngaro donde permaneció durante un año con sus lías. Tan solo se elaboraron 660 botellas.
Vista: Color dorado limpio de intensidad media.
Nariz: De intensidad media, predominan de inicio las notas algo reductivas de sésamo tostado, que se van disipando con la aireación, ligeras notas oxidativas junto con notas de flores amarillas, ciruela amarilla sobre un fondo de ahumado y de avellana que le aporta la crianza en barrica.
Boca: En boca tiene buena intensidad, tiene volumen y muy buena acidez, textura satinada, es sápido con final agradable de buena longitud.