“Por su carácter visionario, su espíritu emprendedor y de trabajo y su firme apuesta por el turismo del vino, impulsando el departamento de enoturismo en todas sus bodegas, así como por su liderazgo e impulso decisivo en la creación de algunas Rutas del Vino y su apoyo permanente a las ya existentes”. Con este fallo, el jurado de los V Premios de Enoturismo ‘Rutas del Vino de España’, convocados por la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin), ha concedido al empresario y bodeguero Carlos Moro el premio al Mérito Enoturístico. “Quiero dar las gracias a la Asociación Española de Ciudades del Vino por este reconocimiento. Desde que fundé Matarromera establecí un modelo de gestión que apostase por la difusión de la cultura del vino. Para ello hemos trabajado durante décadas en el desarrollo de bodegas accesibles, atractivas, divulgativas y que ofrezcan opciones personalizadas y de interés para los visitantes. Nuestro país lo tiene todo para llegar a ser un referente a nivel mundial y debemos trabajar unidos para conseguirlo ya que el enoturismo contribuye a la sostenibilidad económica, social, medioambiental y al desarrollo económico rural”, aseguró Carlos Moro tras conocer su premio.
Desde que fundó Matarromera en 1988, su primera bodega de un total de diez, Carlos Moro siempre tuvo claro desde el principio que quería abrirla al público, en una época en la que el enoturismo en nuestro país estaba sólo en los inicios. Pero el empresario siempre pensó que las visitas a las bodegas eran un elemento indispensable para dar a conocer su buen hacer y lograr que los visitantes sintiesen el vino como suyo. Así, en el año 2001, siendo miembro del pleno de la Cámara de Comercio de Valladolid, redactó el Primer Plan Estratégico para el sector del enoturismo en Castilla y León; y fue, además, socio fundador e impulsor de las Rutas del Vino de Ribera del Duero, Cigales y Rueda.
Con la Bodega Emina dio un salto sustancial en el ámbito del enoturismo pues se concibió, además de para elaborar vinos de alta calidad, para ofrecer unas visitas muy bien documentadas, con un Museo del Vino de la Ribera del Duero y un jardín de variedades de uva. Incluso habilitó su propio hotel rural formado por dos casas familiares ubicadas en Valbuena de Duero, y el Restaurante La Españada en el mismo complejo de Bodega Emina, un referente en la zona especializado en cocina de proximidad. De sus diez bodegas, siete son visitables y en todas se realizan actividades vinculadas con el mundo del vino.