La Consellería de Medio Rural ha autorizado una modificación del pliego de condiciones de la Denominación de Origen Ribeira Sacra -solicitada por el Consejo Regulador- que afecta a los valores límite de algunos parámetros analíticos de determinadas categorías de vinos, en particular a la acidez total mínima, a la acidez volátil máxima y al contenido máximo de sulfuroso. Estas modificaciones buscan adaptar los parámetros analíticos de los vinos a la situación actual, ya que estos valores habían permanecido prácticamente inalterados desde la creación de esta denominación.
Recuerdan desde la Xunta que en la actualidad se están haciendo vinos que pasan cada vez más tiempo en depósito, frente a lo que era habitual hasta ahora, lo que influye en el aumento de la acidez volátil y en la bajada de la acidez total, así como en el aumento de los valores en dióxido de azufre para evitar una excesiva acidez volátil.
Con los cambios introducidos se rebaja la acidez total mínima de los vinos, que pasa de 4,5 a 4 (medida en gramos de ácido tartárico por litro) y se aumenta el valor de la acidez volátil máxima en los vinos tintos (hasta 0,80 gramos de ácido acético por litro) y en los vinos blancos y tintos que se etiqueten como “Barrica” o “Guarda” (pasando el máximo a 1,20 g/l para los tintos y 1,08 g/l para los blancos). Por otra parte, en lo referido al dióxido de azufre máximo permitido, el límite queda en 150 miligramos por litro en el caso de los vinos tintos y en 200 miligramos por litro para los blancos y rosados.