Creo que debo hacer un resumen sobre las virtudes que esta profesión de barista debe tener. Me gustaría aclarar que el título solo es por creatividad fonética, respeto mucho el arte de manipular y ejecutar espectáculos con uno o más objetos.
1.- Humildad por aprender: Un Barista sabe que el conocimiento sobre el café es infinito y debe seguir investigando sobre su origen como producto agrícola y sus distintos procesos para obtener los mejores sabores como bebida. Todo esto empieza por respetar y admirar a los que les llevan algunos años en esto.
2.- Ordem e Progresso: Menciono el lema de la bandera del primer productor del mundo de café para recordar que no conozco a ningún verdadero barista que no sea una persona metódica y ordenada para trabajar y, mejor aún, avanzar en su progreso profesional. Por cierto, cabe mencionar que son unos obsesionados por la limpieza.
3.- Desafía sus conocimientos: Un extraordinario barista es inquieto y pone a prueba lo tradicional con el fin de aprender y dar a conocer nuevos conceptos sobre café, pero siempre basados en fundamentos del conocimiento.
4.- Vocación de servicio: Siempre tienen la disposición para ayudar a desarrollar nuevos baristas, creen que mientras más sirvan a los que empiezan o se interesan por esta profesión, mejores serán. Por eso, muchos de estos baristas se dedican a la formación.
5.- Crean buen ambiente: Normalmente, esto es algo que se nota y se palpa mucho en los campeonatos: los que apuntan buenas maneras o los que ya empiezan a consolidarse trasmiten un clima de colaboración y confianza.
6.- Sentido de la estética: Ver trabajar a un excelente barista, y más en un campeonato, es un lujo: ver los accesorios que lleva, ver cómo los coloca, cuidar hasta el más mínimo detalle y todo con un sentido de armonía que trasmite su personalidad.
Estoy seguro que existen más virtudes importantes en cada barista, pero éstas son las que principalmente he observado en estos once años organizando campeonatos de escuelas y profesionales. Es maravilloso ver la evolución de algunos de ellos.
Los que, por el contrario, no se han desarrollado en forma humilde, ordenada, servicial, etc. no los podemos considerar baristas ni siquiera malos baristas, ya que sólo mencionar la palabra barista estaríamos bajando el nivel de los verdaderos profesionales.
Augusto Morales