Tres hermanas (María, Sara y Adriana Domínguez) llevan las riendas del nuevo establecimiento hotelero de O Grove, el Hotel Boutique Vilavella. Este proyecto familiar abrió sus puertas en julio y no ha dejado de cosechar éxitos desde entonces. Así, este flamante complejo dispone de 14 habitaciones -una de ellas adaptada a personas con movilidad reducida- cuya decoración está inspirada en lo que tienen cerca, el mar. Además, cada una de ellas lleva el nombre de una playa de O Grove, un detalle que marida a la perfección con la filosofía del hotel: un turismo ‘slow’ donde prima la cercanía con el cliente. Otro de los puntos fuertes de Vilavella son los desayunos que ofrecen. “Los trabajamos a la carta y es lo que a la gente le gusta. Tenemos bebidas calientes y frías; diferentes tostadas como la de pan tumaca; bowl de yogur o huevos revueltos. Hacemos todo al momento, evitando el desperdicio alimentario”, afirma María. Por otro lado, Vilavella cuenta también con una taberna -denominada Canta Claro- en la que tanto huéspedes como turistas o nativos encuentran una propuesta gastronómica basada en la cocina tradicional. “Hay embutidos, marisco, elaboraciones típicas de la zona como la richada o los huevos con pan de maíz y chorizo”, señala Domínguez. En cuanto a los vinos, aunque hay de varias denominaciones de origen, destacan los provenientes de la DO Rías Baixas. Para poner el toque dulce a la mesa, proponen queso con membrillo o arroz con leche.